«Billy Idol Should Be Dead» lleva al público a un viaje crudo y fascinante a través de la vida de uno de los rebeldes más icónicos del rock. El ganador del Grammy, Jonas Åkerlund, regresa al largometraje documental para descorrer el telón de cuero sobre el meteórico ascenso de Billy Idol, desde provocador punk burlón hasta superestrella del pop de la era de MTV. Utilizando imágenes de archivo nunca antes vistas y entrevistas íntimas, la película se sumerge en los años de formación de Idol y en el caos personal que casi acaba con todo. Más que un simple documental de rock, es una historia sobre cómo ajustar cuentas con el pasado y encontrar un camino hacia adelante. El estilo cinético y la franqueza inquebrantable de Åkerlund ofrecen un retrato inolvidable de un hombre que ha burlado a la muerte, desafiado las expectativas y que todavía domina el escenario con la misma arrogancia que lo distinguió por primera vez. Tanto para los fans de toda la vida como para el nuevo público, esta película es una celebración imprescindible de la resiliencia y el rock 'n' roll.